Entrevista con la Dra. Lynn Somerstein por Nina Zolotow, traducción al español de Alma Durán
Nina: Muchas gracias Lynn por las entrevistas que me concediste acerca del Ansiedad y Yoga, Depresión y Yoga, y El Yoga y la Ira. Hoy desearía escuchar lo que piensas sobre la pena.
Considero que la pena es una emoción bastante compleja. Me parece que las personas pueden vivir esta emoción -o quizá serie de emociones- de formas muy variadas, y que la pena no siempre significa dolor. Desde tu perspectiva: ¿Que consideras que es la pena?
Lynn: La pena sigue a una pérdida; la persona que la sufre se siente deshecha, como un pequeño árbol destrozado por un machete. Con el tiempo nuevas ramas y hojas podrán crecer de nuevo en ese tronco, la pena se convertirá en pesar, y el corazón se mantendrá suave y abierto. Otra opción es que la pena no cambie, el troco muera y el corazón se congele, amargándose quizá; el corazón se mantiene cerrado porque cree que es una forma de protegerse. Para pasar por el proceso de duelo se requiere de valentía.
Nina: Comúnmente se piensa que la pena es consecuencia de la muerte de alguien a quien queremos. ¿Se puede experimentar pena por otro tipo de pérdidas? Y: ¿Será que durante tiempos en que hay muchos cambios las personas experimentan mas la afflición?
Lynn: Por supuesto que el fallecimiento de alguien a quien queremos –espos@, amig@, o hij@ aún mas– genera procesos de duelo. En otras ocasiones, sin embargo, nos hemos perdido a nosotr@s mism@s, sentimos que hemos pasado como por pequeñas muertes tales como cambios corporales, daño cognitivo o incapacidad social. Lo que era nuestra forma normal de ser o estar ha desaparecido.
En estos momentos todos estamos sufriendo múltiples pequeñas muertes. El Covid-19 ha producido grandes pérdidas a nivel mundial. Vivimos como en un limbo. Esta pandemia ha cambiado nuestro mundo; el pasado ha desaparecido, nuestro presente es ambiguo y el futuro incierto. ¿Qué pasará en seguida?
Nina: He escuchado de varias fuentes expertas, que incluyen una doula acompañante en la muerte y una enfermera de un hospicio, que a la pena hay que dejarla correr su curso normal. Dicen que hay que sentirla en todo su impacto y darle el tiempo que necesite para pueda transformarse. ¿Qué piensas de ello?
Lynn: El duelo es un proceso orgánico que hay que experimentar plenamente a nivel del cuerpo y mente en sus propios términos y tiempo. Ésta, al igual que la práctica profunda del yoga, afecta cada célula del ser.
Nina: ¿Como puede el yoga ayudarnos si estamos pasando por un proceso de duelo?
Lynn: El yoga nos ayuda a estar en el momento presente haciéndonos conscientes de que todo lo que experimentamos es temporal, al igual que nosotros mismos. Aprendemos a ser pacientes ante el dolor y a no tratar de escapar de él, a valorar la alegría, a reconocer la fugacidad de la vida misma y de todo lo que existe.
Nina: ¿Cuáles son algunas de tus poses favoritas con las que ayudas a personas que están pasando por una gran pena?
Lynn: El estilo de yoga no importa tanto, sino el que se viva una experiencia total al practicar: que te haga sensible a tus emociones, reconectándote con tu cuerpo/mente. Una vez que hayas entrado en contacto con tu cuerpo y lo hayas relajado, la posición del niño y Yoga Nidra son muy buenas opciones para que puedas vivir con tu pena y, mucho mas tarde, cultivar una sensación de satisfacción.
Nina: Cuando yo pasé por una etapa de duelo me sentía como si estuviese estresada, o quizá como estresada, pero al mismo tiempo con una gran dolor. Si uno está experimentando estrés, ansiedad, depresión o ira como parte del duelo: ¿Ayuda el utilizar técnicas de yoga que sirven para balancear esas emociones?
Lynn: Si, puedes valerte de cualquier técnica que sientas es apropiada, desde yoga vigorosa hasta restaurativa. Movimientos que requieren de gran esfuerzo pueden asistirnos en deshacernos de la ira. Los ejercicios de respiración nos apoyan a reducir la ansiedad y la depresión. Sentimos una mezcla de pena con estrés porque nos estamos abriéndo. Yoga Nidra y Savasana nos pueden apoyar dándonos una sensación de protección, la cual nos dejará experimentar el duelo de manera segura. El yoga nos ayuda a reconocer y aceptarnos como somos, así como a identificar en qué situación nos encontramos. La mayoría de nosotros hemos experimentado el romper a llorar de repente en medio de una práctica, o el recordar -reconocer, quizá entender- algo de lo que no nos habíamos dado cuenta. El yoga es el vehículo que nos abre y conecta con nuestras emociones mas profundas.
Nina: ¿Es posible estancarse en ese estado de aflicción? ¿Cómo podemos identificar si esto nos pasa? Y: ¿Cómo puede el yoga ayudarnos en ese caso?
Lynn: La pena se puede convertir en circulo sin fin de remordimiento y dolor, recriminaciones repetitivas de porqué y para qué que no conducen a ningún sitio. En ocasiones, las personas sienten que sería desleal superar el dolor. No tanto.
Nina: ¿Hay algunas técnicas o posturas de yoga que deberían de evitar quienes están experimentando una pena?
Lynn: Entrégate con el corazón abierto a la práctica que te parezca adecuada. No trates de evitar los sentimientos de aflicción; el dolor va a venir y tu corazón, en ocasiones, también se abrirá para dejar entrar la felicidad.
Nina: ¿Hay algo más que desees decir a nuestr@s lector@s sobre este tema
Lynn: “Practica y todo vendrá…” Esta frase era frecuentemente dicha por Sri K. Pattabhi Jois.
Nina: Cuando yo pasé por una etapa de duelo me sentía como si estuviese estresada, o quizá como estresada, pero al mismo tiempo con una gran dolor. Si uno está experimentando estrés, ansiedad, depresión o ira como parte del duelo: ¿Ayuda el utilizar técnicas de yoga que sirven para balancear esas emociones?
Lynn: Si, puedes valerte de cualquier técnica que sientas es apropiada, desde yoga vigorosa hasta restaurativa. Movimientos que requieren de gran esfuerzo pueden asistirnos en deshacernos de la ira. Los ejercicios de respiración nos apoyan a reducir la ansiedad y la depresión. Sentimos una mezcla de pena con estrés porque nos estamos abriéndo. Yoga Nidra y Savasana nos pueden apoyar dándonos una sensación de protección, la cual nos dejará experimentar el duelo de manera segura. El yoga nos ayuda a reconocer y aceptarnos como somos, así como a identificar en qué situación nos encontramos. La mayoría de nosotros hemos experimentado el romper a llorar de repente en medio de una práctica, o el recordar -reconocer, quizá entender- algo de lo que no nos habíamos dado cuenta. El yoga es el vehículo que nos abre y conecta con nuestras emociones mas profundas.
Nina: ¿Es posible estancarse en ese estado de aflicción? ¿Cómo podemos identificar si esto nos pasa? Y: ¿Cómo puede el yoga ayudarnos en ese caso?
Lynn: La pena se puede convertir en circulo sin fin de remordimiento y dolor, recriminaciones repetitivas de porqué y para qué que no conducen a ningún sitio. En ocasiones, las personas sienten que sería desleal superar el dolor. No tanto.
Nina: ¿Hay algunas técnicas o posturas de yoga que deberían de evitar quienes están experimentando una pena?
Lynn: Entrégate con el corazón abierto a la práctica que te parezca adecuada. No trates de evitar los sentimientos de aflicción; el dolor va a venir y tu corazón, en ocasiones, también se abrirá para dejar entrar la felicidad.
Nina: ¿Hay algo más que desees decir a nuestr@s lector@s sobre este tema
Lynn: “Practica y todo vendrá…” Esta frase era frecuentemente dicha por Sri K. Pattabhi Jois.
Para más información sobre Lynn, visita por favor lynnsomerstein.com
El original en inglés de este articulo fue editado por Nina Zolotow, jefa de redacción Yoga for Healthy Aging. Nina es también co-autora de Yoga for Healthy Aging: A Guide to Lifelong Well-Being.
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